20 dic 2016

Para cerrar el año... algo de música.



Se dice que la música es para el alma, lo que el ejercicio es para el cuerpo. Así que en vez de escribir, hay que escuchar...









10 nov 2016

Antes de comprar un vehículo.




Bueno, hace unos días, mi cuñado se apareció en casa con un carro para su hermana, para que se lo revisara (tengo buen ojo para los carros... y las mujeres). Tomé mi linterna y empecé a observarlo (a detalle)… a los pocos segundos el me aseguró que era el mejor auto (de ese rango de precios) que tenía el dealer de su amigo. A quien conozco y de quien no dudo; sin embargo, creo que la descripción que haré a continuación puede ayudarle a alguien a saber la condición del vehículo que pretenden comprar:

Hay personas (vendedores) que lo primero que hacen es abrirle todas las puertas del vehículo para que usted admire el interior (gancho o fraude). El problema, es que lo primero que usted debe observar en un auto es la alineación simétrica de todas las partes móviles de la carrocería; es decir, que el espacio entre cada puerta, el baúl o el capó debe ser pareja desde cualquier ángulo. Si hay un desnivel entre las uniones de cualquier pieza: hay una reparación previa. De ahí que, el primer punto es observar todo el contorno del vehículo, aprovechando para percibir cualquier cambio de color o decoloración en la pintura, lo cual indica también una reparación. El segundo punto más importante en carrocería y algo que muchas personas obvian es: verificar la autenticidad de las piezas (sellos de fábrica y la marca original de las micas/luces/ halógenos). Cuando hay un accidente leve, las refacciones que se compran aftermarket son de calidad inferior (se oscurecen, se opacan o se descascaran por el calor); así que, siempre hay que observar que todas las piezas que estén de a par: sean idénticas (nota: estas piezas, no son siempre de la marca del vehículo sino de proveedores. Sin embargo, si una luz frontal dice: Ford y el otro lado dice Loco… sepa que el lado del “Loco”, hay una reparación). El tercer punto a tomar en consideración dentro de la carrocería es: revisar en el maletero y ver si están todas las herramientas originales y el neumático de refacción, si hay alguna deformidad, oxidación o decoloración entre la unión del panel trasero y el piso del vehículo, así como la condición general de los sujetadores plásticos de los paneles (roto o ausente, significa manipulación); lo mismo, al levantar el capó y revisar los tornillos y paneles laterales (fenders, guardabarros) del vehículo: (Nota: cualquier manipulación o desarme raya los tornillos de sujeción y es una muestra de un trabajo “mayor”). Sobra decir que, hay marcas a las cuales se le oxida todo, así que sin importar su edad, su ropa limpia o su dignidad: agáchese y observe detenidamente por debajo del vehículo, revisando: oxido, fugas de fluidos, reparaciones o daños inferiores en la carrocería. Todo esto es un “poquito” importante… y su vida dependerá de ello.

El 90% de las mujeres y el 40% de los hombres se conformarían con revisar lo anterior; es decir, apariencia: si les gusta lo de afuera, lo compran… y se tragan su orgullo, aunque consuma mucho y se dañe siempre. Sin embargo, debemos pasar al segundo punto general más importante, o sea, el motor (corazón del vehículo). Lo primero, es saber cuántas llaves tiene un vehículo (sea smartkey o regular), luego debe procurar observar si el vehículo que le venden tiene un CarFax (recuerdo una hermosa HHR panel que me vendían con 43,000 millas… salvo que según el CarFax dos meses antes tenía en Florida unas 340,000 millitas). En esencia, no confíe en el kilometraje de un vehículo, el motor le “hablará”: solo escuche y observe…

Cuando usted vea un vehículo con el motor SUCIO: confíe en lo que ve, no es broma. Los dealers tienden a mostrarle vehículos “brillantes” y muy “aceitados”, lo cual solo oculta una serie de fugas y defectos que, fácilmente, pueden terminar en un incendio. Si está muy “brilloso” el motor, mejor pida una garantía (contractual). Actualmente, los motores de 4 cilindros hacen muy poco ruido, incluso los de cadena. Lo que me lleva a algo que las personas obvian: motores de cadena o de correa. En resumen, los motores de marcas como Peugeot, Renault, algunos Ferrari (para que no digan que discrimino marcas), etc. utilizan una correa como mecanismo de movilidad interna del motor (válvulas), si esta correa se parte: destroza el motor). De ahí que, un motor como Toyota, Honda o Nissan utiliza una cadena (como de bicicleta) para el mismo mecanismo. Las correas deben ser cambiadas con mucha mayor regularidad (correas: unas 60 mil millas; cadenas: unas 200,000 o más). Sin embargo, no voy a perder el tiempo con pruebas de compresión, chequeo de bujías, etc. Al chequear el motor, solo debe ponderar estos aspectos: 1) encendido en frío: debe encender sin dificultad, al primer intento; 2) vibraciones: el motor encendido no debe vibrar como si fuera una lavadora llena de ropa; si lo hace, tiene problemas de compresión o de un soporte del motor o la transmisión; 3) quite el tapón del aceite y mire que tan limpio está el interior del motor y el tapón, lo mismo que la varilla de medición del aceite. Estos son dos indicadores que le muestran la condición del sistema de lubricación del motor; y, 4) el humo del escape: bueno depende del clima usted podrá apreciar condensación o un humo tenue (depende del sensor de oxígeno o mezcla); sin embargo, si el vehículo parece una máquina de fumigar (humo blanco) indica problema de fugas de agua en el bloque del motor (corrosión en las juntas, rotura interna, etc.) Y, si es de color azul verdoso, está quemando aceite… lo que me lleva al punto más simple: antes de encender el vehículo, específicamente al abrir el switch o interruptor (donde encienden todas las luces del tablero): fíjese en la luz que diga “Check Engine” (o un símbolo de motor) y al encender el vehículo, observe que se apaga. La cuestión es que hay vendedores y mecánicos que le sacan esta luz para esconder problemas de motor, transmisión o sistema de escape.

En este punto, luego de chequear la carrocería y el motor (imaginemos que están bien), El punto general número tres es que: debe verificar la dirección y la suspensión. Sentado con el vehículo apagado debe girar el volante unas 2-3 pulgadas a derecha e izquierda (sin trancarlo) si en ese movimiento suena un “tun, tun” o sonido hueco: hay un terminal de la dirección con problemas. La suspensión… no tiene que pasar por todos los baches que vea (si en verdad quiere comprar el vehículo) basta con abrir el cofre o baúl y presionar el vehículo hacia abajo: si a la tercera o cuarta vez no “cargan” los amortiguadores y el vehículo “rebota” o se siente suelto, deberá comprar nuevos amortiguadores traseros. Lo mismo se hace para los delanteros, aunque debo advertirle que NUNCA debe presionar el vehículo por la carrocería (fenders o guardabarros) sino por las partes internas del chasis (barra donde está el seguro del capó).

Una vez revisado esto, viene el interior del vehículo: probar todo el equipamiento, ver qué falta, que está rayado, revisar los manuales, el sunroof, si tiene una hoja de mantenimiento, si funcionan todas las luces, los limpia vidrios, el radio, el desempañador del vidrio trasero, las ventanas eléctricas o manuales, etc. Ahora, me preguntará por la prueba de manejo… si anda recto, frena sin sonidos o vibraciones y al girar no parece como que se le quisiera salir una rueda: es una prueba aceptable.

En esencia, si le gusta un auto, debe averiguar un poco de esta marca o modelo ANTES DE COMPRARLO; se lo dice alguien que mandaba a buscar piezas en Japón… eso sí, mi mejor carro. Y se los aconsejo, porque en América hay muchos vehículos hechos para el mercado japonés o europeo a los cuales le cambian el guía de derecha a izquierda y si importar lo bien hecho que esté el trabajo, hay una sola cosa que los vendedores no le dicen a los compradores: los autos con guía a la derecha son diseñados para soportar un fuerte impacto de ese lado; pero, del lado del pasajero (que en nuestro continente pasa a ser el lado del guía) son estructuralmente deficientes para soportar un impacto con el cambio de guía (con raras excepciones, no están diseñados de fábrica para cambios estructurales de este tipo) eso, al margen de los trabajos "chapuceros" que se hacen para ahorrar $$$ (los carros con guía a la derecha son mucho más económicos... pero, eso es otro tema). Averigüe que su vehículo es 100% seguro, antes de meter a su familia en el.  

Por cierto, no hay carros malos, solo ingenieros incomprendidos… (debo hacer un post sobre la diferencia entre los autos japoneses y americanos desde la óptica del ingeniero). Los europeos, esos tienen su propios problemas y frustraciones. Por cierto, sobre el carro que inspeccioné al principio (Kia Soul): tuvo un choque frontal leve: le cambiaron la pantalla (luz frontal) derecha, no tenía antena, la correa de los accesorios estaba desgastada y había uno de los aros con un poco de “maltrato”. Fuera de eso, estaba impecable hasta los rodamientos.

P.d. El.único defecto que tiene ese Lamborghini Aventador que está en la imagen de arriba es: que no es mío. Fuera de eso, lo aceptaría: fundido, chocado, desarmado en dos mil partes y con el interior destruido por un oso... no creo que haya otro vehículo que supere a esta belleza (nubla los sentidos). Por cierto, si la fábrica quiere que le cuide alguno, yo me sacrifico (jajaja).  

25 oct 2016

A mis 38.


Primer año de la última década que no tengo audiencia(s) el día de mi cumpleaños… aunque en la oficina querían engañarme para que fuera (fiesta sorpresa). En esencia, se me juntaron tres (3) bizcochos de chocolate, rellenos de chocolate y bañados en mucho chocolate (algo así como mi preferido)… algunos desarreglos deben hacerse en la vida, todo por la familia.

Pasar este día en familia, compartiendo y reflexionado sobre lo sucedido en el año que pasó: esa, es la regla. La excepción, bueno, aún no la tengo. Feliz cumpleaños para mi; y que, yo siga siendo el mismo muchachito independiente (jodón), aventurero (malcriado) y terco (mañoso). Si pierdo esa esencia, sería solo un adulto responsable y maduro (jajaja). “Madurar… eso, es de frutas”.

P.d. Quizás la lectora o el lector, no entienda la ironía; así que en esencia, le diría que soy uno de los tres (3) hombres más rectos y responsables que usted conocerá en su vida; sin embargo, disfruto de mi familia como si fuera un niño, bueno, con habilidades sobrehumanas. A nada le temo, todo lo puedo y disfruto cada momento como si fuera eterno. Algo así... y sí, mi deseo es vivir unos ciento y tantos años. Bueno, si Dios lo permite (sino, el mundo seguirá dando vueltas como si nada).  

14 sept 2016

Los “tablazos” de la vida.



En estos días, recordé esta imagen. Estaba jugando con Pucky (chihuahuita)…

A ver, a resumidas cuentas: mi papá le pidió a un amigo un perro que “cuidara de las ovejas” y que “no las lastimara”. Uno pensaría que un hombre con tantos perros de raza sabría elegir lo “mejor de lo mejor”. En fin, Pucky llegó a la finca como una cachorra (más chiquita de lo que es, bueno, no tanto). A simple vista, era un buen ejemplar de Rottweiler… salvo, que nunca creció. Mi papá se sorprendió el día que le dije (tenía 6 meses comiendo como loca y no crecía) que ella era una chihuahua y que no crecería ni un centímetro más (si sabré yo de estas enormes criaturitas). Al efecto, la perra es más pequeña que mi zapato; pero, ladra como Godzilla (bueno, si Godzilla ladrara… la idea es que hace mucho ruido y corre como si tuviera dos tanques de NOS (oxido nitroso); eso, y que le encanta jugar con los gatos... criados con ella). Aunque no he podido traerla a casa por los demás gatos (de ciudad; se la pueden comer, por confianzuda), así que: me evito el problema... por ahora.

La cuestión de los “tablazos” a los que me refiero, no es a “golpes”, sino a que, en la vida hay situaciones inesperadas que son esencialmente negativas. Ej. Una goma (neumático) pinchada en un día ajetreado, un pez muerto (suerte que quedan 8), y ni hablar de situaciones como muerte de un familiar, amigos con problemas, falta de tiempo, etc. Sin embargo, siempre tiendo a buscar lo “aceptable” (no lo bueno) de las cosas. Y no me refiero a que: “todo pasa por una razón”; si no, a que “las cosas, sencillamente, pasan”. En mi caso, que siempre tiendo a desafiar a Dios, a la vida, etc. Dios me ha “recordado” muchas veces, que la humanidad no es la naturaleza de las personas, sino la actitud que tomamos frente a esas cosas que escapan a nosotros.

Mire, la imagen de arriba, algo sencillo: ¿Qué sostiene a la señora? Si usted dice que una silla… no, no es la silla; es, una simple costura en la tela. Podría verlo como cualquier punto vulnerable: densidad del metal, resistencia de las uniones, peso de la dama, grosor de la costura, tipo de tela, aleación de metal, resistencia del remache, etc. Vuelva a mirar la imagen: ¿Qué diantres hace ese pobre animalito ahí debajo? ¿Mujer distraída? ¿Día soleado? ¿Hará frío? Bueno, el perrito o perrita está aterrado (posición de las patas). Ahora bien, ¿Qué le diría a la señora? ¿Se ofendería? ¿Trataría de pararse? ¿Soportará la silla? ¿Estará vivo el perrito? ¿Le importará ese perrito/a? ¿Fue solo algo publicitario?

Si se ha perdido en las preguntas: todas son válidas y… ninguna importa. El perrito (o perrita) no tiene la menor idea del “peligro” que existe. Así, nos sucede en la vida: te dices “es solo un viaje”; pero, sorpresa, en tu viaje: el mundo no se detiene, y todo ha cambiado: vida, muerte, amor, desamor, alegría, tristeza; y, un montón de cosas más. ¿Valió la pena el viaje? ¿Valió más haberse quedado? ¿Qué lograste? ¿Qué aprendiste? ¿Cuánto amaste? ¿Tomaste la decisión correcta?

Sí, se que en esta vida nada es “correcto” o “incorrecto”. Sin embargo, cuando haces algo de corazón como que nada más importa. ¿No es así? La vida, es todo lo que sucede mientras planeas vivir. Son las cosas incontrolables las que controlan nuestro destino. Sí, suena estúpido; pero, es así. No se trata de dudas o fracasos, se trata de que la vida siempre trae consigo: cosas que escapan a nosotros. Y esos “tablazos”, sin importar los golpes o las heridas, solo son la consecuencia natural de toda existencia.¿Qué es lo único que verdaderamente importa en la vida?  Vivirla, como si fuésemos a morir pronto; pero, pensando en que jamás moriremos. Si entiende esta frase, le felicito: sabrá tomar las mejores decisiones… o, al menos, tendrá el tiempo para reflexionar. 

16 ago 2016

La primera década de este blog.


 Este blog: tiene una década

He sostenido que estos espacios de reflexión o de simple desahogo, son la manera con la que Google se ha beneficiado más como empresa. ¿Por qué? porque, nos da a las personas comunes una simple forma de expresión y eso, acerca el producto a las masas sin importar fronteras, idiomas o culturas. No hay barreras; bueno, aunque hace unos pocos años, se han apretado algunas tuercas. Se que a nadie le importa si Bill Gates gasta millones de su fortuna en promover un reactor nuclear (Torio) en miniatura, auto sustentable y que se pueda instalar en cada hogar del mundo. También se que a nadie le importa que no puedo llevar mi chihuahua de la finca a la casa, para que no se me la “coma” un gato… es muy chiquita y confianzuda. De igual modo, nadie necesita interrogantes sobre el amor, vivencias, teorías locas o simples manías. Sin embargo, toda la basura o sabiduría que publicamos: eso, es una parte de nosotros y de nuestras vivencias.

¿Por qué Blogger? Bueno, en mi caso, siempre les digo a las personas que nuestras acciones son la fiel imagen de lo que somos. Y sí, se que hay decenas de lugares “blogueriles” más modernos, espaciosos, monetariamente rentables, etc.; Pero, en la vida, soy de los que cree en la fidelidad de las cosas. Y no me refiero a quedarme estancado con una preferencia; no, sino a que: si algo funciona bien, no hay que cambiarlo. Así que comencé a escribir con Blogger y terminaré aquí. Si se daña o tiene un problema, buscas repararlo, no reemplazarlo. Y quizás, ese es nuestro mayor problema como personas: todos quieren publicar en Facebook o Instagram, que le den un millón de likes y sentirse los Reyes del Mundo. De mi parte, solo le pido a Dios que cada basura que publico, ayude a una sola persona a despertar, o encontrar la solución a un problema. A entender que no hay mejores personas que nadie, que nadie es perfecto; que nos equivocamos, y comenzamos todo de nuevo. 

En fin, como todo en la vida: CAMBIA, sin excepciones; lo más humanamente aceptable es, tratar de hacer perdurar las cosas. Y eso, lo hace un blog. Así que, mientras estas “personas” de google (las máquinas sustentadas en IAs (inteligencias artificiales) son las que deciden la pertinencia de las “aplicaciones”, en base a cuantificación numérica (algoritmos, beneficios económicos), sigan con mantener a Blogger abierto: AQUÍ, me quedo… con todas mis imperfecciones, manías y disparates existenciales.

Por cierto, debería de escribir sobre mi experiencia en estos diez años, y cómo he mantenido este blog. La mujer es la máquina que mueve el mundo de un hombre, el mejor invento de Dios y fuente de inspiración inagotable. En diez años, he aprendido a cultivar la paciencia, la vida me ha dado algunos “tablazos” (al margen de los que yo mismo me he dado) aunque admito que la fe y la esperanza me han ayudado; he cambiado en varios sentido; aunque, todavía me gustan las mujeres altas, rubias y de ojos claros. Pero eso, es genético (sangre catalana y francesa). Sin embargo, si me conoce solo un poco, sabrá que jamás he apreciado a una persona por su apariencia; eso, se gana solo con afecto. He aprendido a jugar con el tiempo, a compartir más con mis seres queridos. Hay un lote de cosas “sinsentido” y meramente practicas que he aprendido como pasatiempo; y cosas que he hecho, por mera diversión… si, he vivido una excelente década. Si, se han escrito unas cuantas palabras y se han hecho algunas amistades; aunque, algunos bloggers han “caído”, han emigrado o simplemente han dejado de escribir... pero, así es la vida (y me refiero a la vida, fuera del ciberespacio).

P.d. Solo espero que Blogger dure: mucho más que yo. 

17 jul 2016

Muchachitos de ayer vs muchachitos de hoy: cosas de la TV.



Antes, a finales de los 80's y principios de los 90's, tenías una TV con señal aérea y si querías ver bien la imagen tenías mover la antena en TODAS las direcciones, y en casos extremos, adaptarle una percha de ropa y/o hacer malabares para que la señal fuera “aceptable”. Habían televisiones (más viejas que mi tiempo… arcaicas, diríamos) de tubos al vacío que había que encender hasta que calentaran y se pudiera ver algo de señal. Eso es otro tema y un par de generaciones antes de la mía (imagen a blanco y negro). Debías levantarte a cambiar el volumen y cada canal (del canal 2-13 VHF y hasta el canal 69 en UHF). Y lo mejor de todo es que si intentabas reparar la TV tu mismo: podías morir electrocutado, ya que las TV de “vieja escuela” tenían grandes bobinas y capacitores que almacenaban una buena cantidad de corriente por días. Un solo toque en falso y te quedaba la mano temblando, con algo de olor a pollo frito… aún desconectada. Por cierto, para ver un par de chicas en “bikini” en la TV, había que trasnocharse (12:30 a.m., en adelante). Quizás, por eso todos en el colegio teníamos “ojeras” (jajaja).

Ahora, tenemos fibra óptica, live stream, Netflix, grabación de programas favoritos, telecable, etc. Todo en formato 720P / 1080P o superior (alta definición hasta 3D y 4K) para dar una experiencia más realista. Aunque, al igual que en mi época de “muchachito”, las tormentas eléctricas siguen afectando algunas señales; digo, los “salvajes” que aún tienen parábolas… incluyendo las compañías de cable. Sí, hay mucho más variedad y fácil acceso a TODO tipo de contenido... ya, nadie se trasnocha, salvo por aburrimiento (risa). Si se daña el control remoto, es como una TRAGEDIA para algunos muchachitos (le dan golpes, les rompen las tapas, etc.; ni saben que las TV’s tiene botones con las mismas funciones (y no diga que no: nadie se para ca cambiar una TV, salvo una emergencia). Reparar esas Tv’s es tan sencillo como quitar seis u ocho tornillos y cambiar dos condensadores pequeñitos con estaño, o comprar una tarjeta. Solo se electrocutará: a) por un alto voltaje en el telecable (esto es en serio, si la señal se ve mal, no intente desenroscar el conector de entrada); o, b) si deja la TV conectada al enchufe, y usted está sudando o le cae algo de líquido al sistema, mientras “intenta” limpiarla con un trapo húmedo. Posiblemente, los muchachitos de hoy insinúan que hay que cambiar la TV porque es vieja (de 3 años en adelante). Aunque antes, duraban décadas... y mientras las tv leds pesan unas 10-30 libras; las de antes, pesaban como 100 o más libras.

Por mi parte, extraño una TV “flat Screen”  de 27 pulgadas que lanzó JVC en una época donde las TV’s traían un equipo de sonido “Surround” 2.1 (con subwoofer)... esa cosa, pesaba como 120 libras. (imagine, tener que cargarla desde la marquesina hasta la habitación... pero sonaba nítida; y, como me la regalaron: nada de queja. Me duró como 5 años).  Y recuerdo mi VHS Panasonic que traía un control de canales (Tuner interno) que permitía “decodificar” algunos canales de señal “polarizada” (cosa de hombres). No lo boté, lo desarmé en mil pedazos que aún conservo. Por cierto, en esa época, si se ensuciaba (magnetizaba) la cabeza del VHS, había que poner una cinta durante unos 30 minutos hasta que la imagen se corregía… buenos y sanos recuerdos.  

3 jun 2016

El Tránsito en Santo Domingo.


Recuerdo esos días, hace unos 20 años, en los que podías tomar tu carro o camioneta, salir de la ciudad por la Autopista 6 de noviembre y… llevarlos al límite. Había muy pocos vehículos, comparado con esta fecha. Podías encontrar parqueo en cualquier lugar de la ciudad; los autos estaban BIEN fabricados y, la autoridad se respetaba.

Hoy en día, en nuestra JUNGLA de cemento: tratas de sobrevivir a miles de vehículos que transitan junto contigo en una especie de CAOS organizado. Si me pusiera a escribir experiencias, serían miles; sin embargo, hoy solo quiero referirme a lo elemental: un granito de arena para ordenar el tránsito de nuestra ciudad. Por cierto, no hay que ser ingeniero de la NASA, ni un físico teórico con 5 doctorados para identificar los problemas de esta ciudad. Y no me refiero a exceso de vehículos, falta de autoridad, o a “salvajes” al volante. Me refiero, simplemente a “fluidez”.

Nuestro primer problema son las vías. Mucho hemos hablado de los carriles expreso, los elevados y paso a desnivel de la Av. 27 de Febrero y de la John F. Kennedy (Autopista Duarte)… varios períodos de gobierno de obras; sin embargo, siempre he sostenido que: si los túneles, elevados y pasos a desnivel hubieran sido realizados en sentido Norte-Sur/ Sur-Norte, hoy en día, tuviéramos un tránsito fluido en los cuatro sentidos cardinales. Eso, a su vez, despejaría las avenidas secundarias (Norte-Sur y a la inversa) y la ciudad no tuviera este caos, al margen de los esfuerzos de AMET y Obras Públicas. Bueno, nadie me consultó y de haberse hecho así, habría costado miles de millones menos (algo, quizás, no conveniente para los contratistas del gobierno).

El segundo problema, es el transporte público. Cómo es posible que en una avenida como la Máximo Gómez (de solo DOS carriles) esquina Av. Independencia, donde doblan TODOS los vehículos de carga que vienen desde Haina o el Sur hacia el Este o Norte, haya una PARADA de carros públicos… y los AMET, solo se paran en la esquina??? Esta situación se repite en cada Avenida de esta ciudad, no obstante estar PROHIBIDO ESTACIONARSE EN UNA AVENIDA… ¿Y la autoridad? Eso, solo aplica para infelices ciudadanos del transporte privado. Los carros públicos pueden andar sin cristales o puertas, sin cinturones y con un sistema de gas propano “handmade” o sea, un tanque de gas para hogar, acostado y conectado con una manguera de agua verde de jardín… es decir, bombas de tiempo sobre rueda; sin embargo, al ciudadano común lo multan por una luz quemada.

El tercer problema, lo llamaría transporte de carga/ vehículos pesados. Me explico, en una sociedad organizada y utópica, en la República Dominicana, los vehículos de carga debieran transitar de NOCHE: de 9:00 P.M a 5:a.m. Eso aplicado para todo vehículo pesado, sería como vivir en otro universo. Y eso, debido a que, al igual que el transporte público, el transporte de carga tiene reglas PROPIAS. Ej. He visto camiones sin carrocería, con dos linternas de vigilante o sereno amarradas con cinta pegante (tape) al chasis del vehículo. ¿Alumbran? No, pero aparentan ser luces (y así cumplen la ley). El mayor problema es que no hay un control de las cargas o el estado de estos vehículos y andan por la vía pública a 30km/h o menos, en lugares donde el tránsito fluye hasta 80km/h (o sea, Avenidas). Un solo camión averiado, causa tapones de más de 1 kilómetro o de centenas de metros ¿Por qué? Porque carecemos de una AUTORIDAD que ponga un control. Es magnífico sacarle a un vehículo el máximo de vida útil hasta volverlo chatarra; sin embargo, lo correcto sería renovar la flotilla, cada cierto tiempo. Y no hablo de contaminación, porque ese es el menor de nuestros problemas (somos isla).

Quizás, usted piensa que la propia persona es el principal problema y cuarto elemento. Sin embargo, se equivoca. Conducir, es conducta adquirida. Poco importa su educación, religión o karma. Y es dentro de esa conducta adquirida, donde entra la AUTORIDAD como guía. El ejemplo sencillo es un REBAÑO: van donde el pastor les guíe. Sí, he visto madres conducir, maquillarse y hablar por teléfono a la vez, mientras su hijo salta en el asiento trasero; he visto motociclistas suicidas, imprudentes, salvajes que persiguen ambulancias para evitar el tránsito. Pero al final, son las simples medidas administrativas, las que causan el mayor resultado (de la Autoridad). Un ejemplo de ello sería la Avenida George Washington. Siendo de dos carriles (en cada sentido) desde la Av. Abraham Lincoln hacia la Zona Colonial: si bloquearan los giros desde la calle de Cancillería (Paseo de los Médicos), la del Banco Agrícola (Alma Mater) y prohibieran los pasajeros en la calle frente a la estación de Gasolina (parada de guaguas hacia el Sur)… eso daría un cambio en la fluidez increíble. Eso, si prohíben el parqueo de vehículos frente a esos “negocios” que hay posterior a esa parada viniendo de este a oeste.

El punto está en que nuestra situación actual de CAOS VEHICULAR no depende de exceso de vehículos o falta de vías: se debe a infractores de la ley que ocupan carriles y estacionan donde no deben; que andan por la vía a una velocidad INFERIOR y a los agentes de la Autoridad Metropolitana del Transporte (AMET), que en muchas veces, ocasionan un caos mayor al TRATAR de dirigir el tránsito en UNA SOLA DIRECCIÓN durante varios minutos, congestionando vías posteriores, sin necesitad. Bueno, salvo que usted sea FUNCIONARIO DEL GOBIERNO… siempre llegará a tiempo. Para los demás mortales, ya muchos nos acostumbramos a llegar una hora antes a los lugares de destino. En fin, dealers que ocupan la vía pública con sus vehículos de “exhibición” para vender; vehículos del transporte público aparcados en las esquinas de las avenidas; transporte de carga tipo tortuga (obstruyendo); personas que “cortan” vías principales para irse por el interior de las cuadras (vías secundarias) y “avanzar” algunos metros: ESE, es nuestro problema en relación al tránsito. La única solución es APLICAR LA LEY a TODOS por IGUAL. En un solo día podemos acabar con este CAOS.

Por cierto, esto NUNCA se corregirá, hasta tanto el GOBIERNO deje de hacernos GASTAR COMBUSTIBLE a propósito, para RECAUDAR MAS DINERO y pagar una DEUDA que solo beneficia a unas 45 personas de los 9 millones de dominicanos. ASÍ, NO PODEMOS SEGUIR.  

17 may 2016

Miss Atomic Bomb & Mr. Brightside.

Hace unos días, escuchando la radio, pusieron la canción Mr. Brightside del grupo The Killers. Y recordé que no he posteado sobre estas dos canciones. Mi blog, tiene casi diez años; pero, entre una canción y otra hay unos 8 años… a pesar, de ser parte de una misma historia.

Me gusta escribir sobre canciones, porque al igual que en la vida: donde algunos ven dolor y melancolía, otros ven amor e historias. Y estas dos canciones no son la excepción. La primera fue Mr. Brightside, la cual puede ser definida, a partir del video, como una historia de amor, donde el protagonista es “engañado” por su pareja. Sin embargo, la letra nos cuenta otra historia: Yo traduciría la primera parte de esta canción como: “Saliendo de mi encierro”… “porque lo quiero todo”… “comenzó como un beso”… “¿Cómo terminó así?”. Sin embargo, la canción termina con un “yo nunca… (¿Te perdonaré? ¿Te olvidaré?). En la escena final, el protagonista se levanta y se va… dejando a su “bailarina”: sola) ¿Celoso? Clarooo; la visión de este video es el de un amor “a medias”; lo que, lleva al protagonista a torturarse (sin comillas) imaginando todo lo que ese “productor” (adinerado) le estaría haciendo su amada, mientras ella no estaba con el. De ahí que la quisiera solo para él (“lo quiero todo”). Hay que estar conscientes de que este grupo y por ende el video (y la experiencia) viene del día a día de la Ciudad del Pecado (Las Vegas). Una cosa es ser un exitoso “productor” y otra es ser el vocalista de un grupo de rock.


Sin embargo, la canción Miss Atomic Bomb (Hola, hermosa y deslumbrante Izabella Miko), cuenta el origen y una parte avanzada (no el final, me niego a creerlo) de esta historia. No es un triángulo amoroso, ni un amor no correspondido; al parecer, se trata más de las decisiones tomadas a lo largo de la vida tanto por la “bailarina” como por el “chico” y de sus consecuencias a través de los años.

La historia comienza con un muchacho “inocente”… y una hermosa bailarina. Una madre controladora y un hombre mayor (empresario o productor de “Shows”, con mucho dinero que se convierte en la pareja de la bailarina. Nota: en Mr. Brightside, el productor envía a la bailarina con otros hombres (deseada, por su belleza) por una “manzana”; ¿Pago? ¿Pecado? ¿Problemas… mecánicos? (jajaja), no sé. Lo que no está claro es cómo la bailarina termina con el adinerado, ya que saltamos del Ballet al desierto, y él (productor) ya la esperaba y estaba en su casa; y sabía de su “amorío” con el chico pero, eso es…. otro asunto.

¿Por qué señorita bomba atómica? ¿Porque cuando explota, nada queda a su paso? O ¿Por que donde llegaba NADIE podía quitarle los ojos de encima? (no es que dejara ciego de tanta belleza; pero, su luz, era su encanto). ¿Señor optimismo?: En cuestiones del amor, a veces, los tropiezos valen más que las ilusiones. Me explico, si él nunca la hubiera encontrado con otro: seguiría ilusionado. Hay mujeres que llevan doble y triple vida (2 o 3 parejas): como si nada (Nota feminista: para los hombres, es más difícil… quizás, haré un post sobre ello). En fin, el hombre se ciega más por estar enamorado que la mujer. La mujer, solo lo cambia por otro… y después, se arrepiente. Pero, esa es otra historia 



En el video, la escena en que sale Izabella Miko (nombre real, personaje bailarina) se ve que ella llega a la colina, y el la espera sonriente, en su moto de drag (para el desierto); aunque, al momento, se le ve llorar con el anillo de compromiso (que él dejó caer al enterarse del otro) mientras la colina se observa vacía (ella esperaba que él estuviera ahí, pero él nunca llegó). En este punto es que YO CREO Y SUPONGO que falta un intermedio de la historia. ¿Por qué?  Porque la Carta, si mal no recuerdo, dice: “Querido amor…” y refiere a encontrarse en aquella colina. El, nunca apareció de joven... pero, la carta llegó al “anciano”. Y me dirá que, como la carta se “desvanece” al final, la historia nunca sucedió??? El problema es que si mira el final del video: hay fotos de ella joven en el trailer que está en el desierto; hay fotos de niños, de FAMILIA… así que, teorizando un poco: falta una parte de esa historia. Digo, algo que no sea: “Just another girl”: 




8 abr 2016

¿CCTV?


Vivir en una casa, te plantea ciertos retos que una persona que vive en un departamento no tiene; uno de ellos, es: el control del espacio. Dado que mi mamá siempre se quejaba de no saber dónde estaba mi papá (patio frontal, patio trasero, marquesina, cisterna, etc.) y con la delincuencia actual, optamos por instalar un sistema de cámaras de seguridad CCTV o de circuito cerrado.

Mi cuñado nos recomendó un técnico y dada mi “manía” de aprender cosas (prácticas) me convertí en un “asistente/supervisor”, ya que solo sabía lo básico de cámaras (nada de programación o instalación de este tipo). Debo decir que, el muchacho cogió lucha al instalar las 8 cámaras; pero, las ubicó donde YO quería (nota: algunos técnicos eligen el lugar de las cámaras ellos… y se ofenden, si uno los aconseja).  Mis parámetros de ubicación fueron simples: lugares altos, que cubrieran los puntos “débiles” de visión (desde dentro de la casa).

Y debo decir que el resultado, es excelente, aunque quiero cambiar algunos ángulos y ajustar el foco de un lente. La estrené (2da noche) con un intento de robo al neumático de repuesto de la camioneta de un vecino que estaba en el frente y casi me da un infarto cuando el estuvo a 2 metros de los ladrones (yo le avisé que los había sorprendido, y que habían vuelto 3 minutos luego… si le pasaba algo: era mi culpa). Pero, al margen del estrés, he usado el sistema de forma productiva, como “herramienta para control de paso de vecinas hermosas” frente a mi casa… jajaja, es broma, solo las pongo en slow motion, a veces (algo bueno debe tener la ciencia: “rewind-slow motion”, “rewind-slow motion”… solo espero no dañar el disco duro (jajaja)). Me recordó la película de Adam Sandler “Click”… y nada, cosa de hombres.

Desde que el técnico se fue (tarde en la noche), me puse a “jugar” con el sistema. Lo dejé “offline” del Internet (nadie más que mi familia necesita vernos), tomé un router (wifi) que tenía sin usar y lo programé para que sirva como wifi exclusivo del sistema CCTV: para tenerlo en la PC y en la tablet (rango limitado). Algo divertido, si estás en la cocina o en el patio, o si usas la TV y quieres ver las cámaras de “reojo”. El problema, es el “retraso” o delay del sistema de 5 segundos (debo examinar si es por la señal Wifi o porque transmite luego de grabar al disco duro). En fin, las vecinas hermosas que caminan por la calle… ese es el lente que debo ajustar; y no es por las vecinas, sino porque al parecer tengo algo de interferencia debido a la distancia y al tendido eléctrico que pasa cerca de esa cámara. Ya probé cambiar la fuente por una de mayor amperaje y el video balloom… quizás, deba aislar esos cables sin electrocutarme.

El punto débil de estos sistemas es que solo graban 5-7 días (dependiendo de la calidad del video) y se vuelve a regrabar el disco duro (debes revisar los videos y extraer los fragmentos que sean importantes). De igual modo, las fuentes de corriente de las cámaras, tienden con el tiempo (meses, si son por debajo de 0.5 amperios) a quemarse  debido a las 24 horas al día de trabajo. Por eso es bueno siempre tener algunas fuentes extra).

Y si se pregunta, sí es algo adictivo ver las cámaras, analizar los videos, etc. Uno se vuelve un CSI de las cosas cotidianas: Ej. ¿Qué hace un gato tomando agua de mis peces? ¿Quién me está obstruyendo el portón de entrada? ¿A qué hora pasan la vecina y su perrito? Etc. Al final de todo, las cámaras cumplen con su función principal: saber dónde está mi papá (que siempre está hiperactivo, como su hijo: “haciendo algo”) y “cuidando el perímetro de la casa”. Las vecinas, solo son un BONO; aunque, las señoras de la iglesia que van los domingos a las 8:00 a.m, tocando el portón con sus sombrillas, eso: NO ES DE DIOS.  

5 mar 2016

Crecimiento exponencial.


Tener peces como pasatiempo, resulta en algo divertido. Aunque a veces, debemos medirnos. Ya hace tiempo me había quejado de mis gupicitos (Guppy: poecilia reticulata). Si, esa pequeña plaga post apocalíptica (deben sobrevivir a todo) que tanto nos gusta en nuestros acuarios y estanques.

La cuestión es que diez pequeños peces, pasaron a ser unos 600 en poco menos de un año. Nada de otro mundo. Sin embargo, al cabo de un recuento a los 90 días, me arrojó lo que calculé en MILES de bichitos (varias libras). De ahí que, tal situación me diera una nueva visión sobre el crecimiento exponencial de la humanidad y de por dónde vamos en este pequeño hábitat al cual llamamos Tierra.

Está claro que no maté un solo pez, a pesar de la abundancia. Tuve que moverme entre varios acuarios para repartir tremenda cantidad y terminé con una docena de Kois. Sí esos pecesitos japoneses que crecen casi del tamaño de un japonés (jajaja). Es broma, solo crecen unos 80 cm o menos (unas 30 pulgadas); pero, todo depende del lugar de crianza y la alimentación. Eran los únicos peces que no había tenido... aún me faltan los Discos, pero eso es: luego.

Debo decir que son más rápidos que los goldfishs de cola simple (Cometas y Shubus); pero, son “cariñosos” cuando tiene hambre. En fin, me quité el problema de los guppis; pero dejé unos cuantos Orange Sunshine… debo buscarles un nuevo hogar, antes de que exponencialmente agoten el espacio. Y nada, me encantaron la mutaciones de color y el cruce de variedades. 

P.d. La naturaleza siempre busca la forma de sorprendernos.

25 feb 2016

¿Nos enamoramos?

Si te dijera que las nubes del ocaso, me recuerdan la luz de tus ojos,
Y que el viento de la mañana, me encierra en el sonido de tu voz.
Podrías suponer, que entre estas prístinas sábanas blancas,
Existe un pequeño espacio, que nos une a los dos.

Dicen por ahí que aún eres una mujer de alma libre.
Que has roto más corazones, que el mismísimo Dios.
¿Sabrán ellos que me buscas por las noches?
Y que estoy a tu lado, aún bajo la lluvia y el Sol.

No eres tu, mi amada; ni siquiera, un recuerdo…
Y aún así suspiro, con el tenue eco de tu voz.
Será que alguna vez pueda darte una caricia,
Que no ruborice toda tu alma… y tu corazón.

Me han dicho que es imposible alcanzar una estrella
Más te mueres de ansias por escuchar mi voz
Y, en una tarde cualquiera, entre risas y ganas…
Algo le roba al tiempo, un poco de la razón.

Quiero vivir contigo, entre letras y versos,
La formula más simple, del verdadero amor.
Y como cada día de nuestra vida, te pregunto:
¿Nos enamoramos, mi amor?

23 feb 2016

Cuestiones de amor: Personas distintas ¿Historias distintas?

Me enteré que un viejo amigo se había separado de su esposa, con la cual tiene dos niños “pequeños” (menores de 10 años). La cuestión es que recuerdo que ellos se conocieron el me decía que eran el Sol y la Luna. Sin embargo, en una época en que la madre de ella estaba enferma él estuvo ahí, mientras la familia de ella estaba ausente. Se casaron, tuvieron problemas para embarazarse; pero, al final, 1+1=3. Bueno, a 4 (familia). Y me extrañó cuando me dijo de la situación, porque luego de unos 15 años de matrimonio e hijos, uno esperaría que las cosas fueran más “estables”.

Lo primero que le pregunté es: “Qué hiciste?”. Me dijo que nada… yo, siempre he sido claro: en esos asuntos, yo no me meto. Pero, me dijo que todo el problema había venido porque los familiares de ella están (se han ido) todos para Estados Unidos y ella se ha sentido sola. En este punto, me dijo que una “amiga” de ella le dijo que lo botara a él (a mi noble e inocente amigo) y se fuera a USA con los niños… “que ella le conseguiría otro hombre”.

¿Hasta qué punto hemos llegado? Se que cada parte tiene su razón en esta historia. Así, que solo quiero limitarme a la interrogante que titula este post. Debo recalcar que al ser educado bajo el catolicismo y de una familia “puritana”, no comparto el criterio de que “mas pá alante vive gente” en un caso de hijos/as de por medio. Se que la regla de papá nuevo, es lo común en toda sociedad moderna. De que la gente busca “vivir su vida” y olvidar el pasado como si se tratase de una “gripe”. Sin embargo, siempre hay algo por señalar…

Todos, sin excepción alguna, cambiamos con los años. Es la esencia de la vida. Cuando formamos pareja: cedemos y tomamos. Optamos por ir más allá de nosotros mismos y compartirnos con alguien más. De ahí que, ante la duda, la disconformidad o la monotonía, siempre he sostenido que la comunicación debe ser el primer paso; ya sea para corregir (cambiar) o para curar (terminar). Sin embargo, ese cambio, a diferencia del comienzo, se sitúa en un lugar especial al momento de tener hijos/as… sin importar la edad. Se lo dice alguien que ha compartido con sus dos padres y que tiene decenas de amigos/amigas criados por padres divorciados, separados o viudos/as como referente para hacer esta diferencia.

Padre y madre solo hay UNO, y es quien nos acompaña por toda la vida. Conozco padrastros y madrastras que son un ejemplo a seguir. Sin embargo, al preguntar sobre cómo cambia una persona con el paso del tiempo, se crea la interrogante de cómo eso afecta la relación de la pareja. Desde hace años expuse que la sincronía de dos son las que crean la unidad. De ahí que al cambiar una parte y la otra quedarse estática, puede crear una fricción en la pareja, la cual deberá ser tratada con mucha paciencia y comunicación. 

Al final, los hijos son lo más importante. Alguien debe ceder, algo debe cambiar… pero, cualquier cosa hecha con amor y paciencia, puede hacerse funcionar.

21 feb 2016

¿La mecánica de la mente femenina?


En estos días, estaba conversando con uno de mis sobrinos sobre su enamoramiento de una compañera de colegio. Recordé esos días en los que uno se enamoraba de la primera mujer que le pasaba por el lado (cosa de hormonas... suspiro: cuanta risas y recuerdos).

Debo decir que yo estudié en un colegio católico, y gocé bastante… hasta que llamaron a mis padres y tuve que apretar algunas tuercas estudiantiles (no todo era basket, mujeres y autos… había que estudiar, un sabio consejo para todo estudiante, de por vida). La cuestión es, que conversábamos sobre diversas cosas y le toqué el punto de que, en general, las mujeres a su edad (casi en graduación) tienden a planear su vida, y (a veces) los hombres somos solo un entretenimiento pasajero (el noviecito). Bueno, lo mismo nos pasa a nosotros.

Le decía, por experiencia, que hay mujeres que saben hasta el nombre que le pondrán a sus hijas/os, sin ni siquiera tener un novio (serio). Mientras que otras, muestran un “manto de misterio” sobre sus planes, cuando en verdad, no saben lo que quieren para el futuro. Por cierto, ninguna está mal, solo son la antítesis ilustrativa de los dos extremos. Le expliqué, que la mujer más inteligente que conocí (al margen de mi hermana mayor: cerebro con patas), nunca terminó la universidad; otra, que era una lumbrera, que tomaba clases de idiomas, computadoras, etc. (en una época en donde nada de esos se usaba) esa, al ver la libertad de la universidad, literalmente: se volvió LOCA (nota: cada cual hace de su vida lo que quiere, no juzgo eso. El ejemplo solo es ilustrativo de cómo reaccionan). Vi muchachas sacar de abajo (pese a no necesitarlo) en aras de ser las mejores en su profesión u oficio (algunas, se volvieron empresarias)… en fin, hay una infinidad de variables que uno como hombre se hace frente a una mujer. 

Sin embargo, cuando somos jóvenes y estúpidos, tendemos a hacer del amor algo puro y nos aferramos a esa idea (eterna); hasta que, la realidad de los años nos lleva por el camino del vino: mejorar la relación o agriarse (alejarse). Quizás, el pensó que le daría un consejo sobre la mecánica (funcionamiento) de la mente femenina y cómo descifrarla. Se diría que con mi edad, lo que se sobre mujeres, tendría una respuesta. La respuesta, no la tiene nadie. Hay hombres que han pasado su vida tratando de descifrar cómo opera la mente de una mujer. Bueno, algo bastante estúpido, ya que, cada mujer, como persona: es UNICA; y, generalizar: NO FUNCIONA.

Bueno, como le comentaba a un grupo de amigos/as una vez en la universidad, la mente femenina JOVEN más allá de retrotraerse a la apariencia, a la necesidad o a las metas preestablecidas (social y personalmente), el 99% de las veces busca adaptarse a su entorno (comodidad y seguridad en una relación). De tal modo, que ver una mujer segura, espontánea y “visiblemente” alegre, solo es la punta del Iceberg. Si quieres en verdad descubrirla, debes sumergirte en su mundo; no tratar de escalarla. Debes seguir su curso, y quizás, perderte en las turbulencias del destino. Acaso no es para eso que estamos los hombres????

Por cierto, la única diferencia entre una mujer joven y una de mediana edad son, sencillamente: los TABLAZOS de la vida; o sea, sus decisiones. Y nada, debo concluir (respetando a las feministas) diciendo que la mente del hombre es algo SIMPLE. Y dado que, casi siempre, METEMOS LA PATA… con la edad, nos hacemos maestros en salir de las situaciones “incómodas”. Hay mujeres que con un “Hola, hermosa” se derriten (literalmente); a otras, puedes “bajarle una estrella”… y solo bostezan.

Al final, solo importa elegir a aquella persona que conozcas, con sus imperfecciones y manías; ya que, con el paso del tiempo, eso es lo que verdaderamente amamos. Solo le aconsejé a mi sobrino que estudiara, se preparara y que esperara a que el destino diera sus pasos… al fin y al cabo, si ella le organizó el cumpleaños… “algo” debe haber ahí. 

19 feb 2016

Cuestiones de amor: ¿Dejar ir?.



Siempre hay que agradecer a Dios por las personas que cruzan nuestro camino. Para bien o para mal, toman algo de nosotros y nosotros tomamos algo de ellas. Algo se aprende, algo se olvida. La vida, debe ser vista como una estación de tren (no como un tren); en donde, a veces, solo a veces… esperamos. Esperamos una señal, esperamos un cambio, esperamos algo que: no llega. La idea se aplica a un sin fin de situaciones de la vida. Sin embargo, hay momentos de la vida en los que la espera se convierte en una “bola de nieve” que rueda en una colina: con cada segundo “crece” de forma desmesurada, destruyendo todo a su paso. Extrapolando el ejemplo a las cuestiones del amor… de eso, es que quiero escribir.

Los hombres, nos enamoramos de una mujer en una fracción de segundo. Sin conocerla, sin hablarle, etc.; eso, es pura atracción física; aunque los gestos, también enamoran. Pero ese, no es nuestro punto. Muchas personas me escriben sobre un aspecto repetitivo: lo dan todo en una relación, y no funciona. Bueno, mis elementos serían: tiempo, edad, cultura. ¿Por qué el tiempo antes que la edad? Recuerde que la vida se marca en nosotros por “momentos” (buenos o malos). Y algo que siempre he criticado de amigos/as es que consideran que una relación se calcula en días, meses o años (sin contar: en hijos). Yo pensaba así, hasta que hace unos años me tocó ver a amigos, hombres y mujeres cuyas relaciones de años y de varios hijos: se terminaban. Nuestro mayor mal social, en la actualidad, es que si algo se rompe: lo botas. Casi nadie se toma el tiempo de examinar su relación, corregir sus debilidades, reavivar la llama, etc. Técnicamente, muchas parejas sobreviven al amor solo por sus hijos o por apariencia social.

Tiempo, algo que nunca nos sobra. Algo que no existe; pero, que jamás retrocede. Un tiempo, una vida. Nuestro tiempo (compartido con alguien), es el mayor regalo que le podemos dar. Si necesita viaje, joyas o dinero… algo no está bien. Y no me malinterprete, no me refiero a cuestiones económicas de la pareja, o regalos, o esos viajes que tanto sacrificio nos dan: me refiero al punto en que esas cosas se vuelven una “recompensa” por haber “metido la pata”. En esencia, una relación de un día o 50 años: su pareja no es un “objeto” suyo. Sigue siendo, la misma persona (libre y plena)… lo que me lleva a la edad.

La edad… mientras más maduramos, más inmaduros somos. No, no es broma. Si recuerda su primer amor (amor inocente), dudo que tenga algún recuerdo negativo. Cuando fue adolescente, hasta si le miraban la muchacha, ya estaba usted sospechando; en su juventud, aprendió a conocer a la persona detrás del cuerpo; al entrar en edad, con los hijos o los años de relación, aprendió que la vida tenía muchas cosas desconocidas y caminos por recorrer; y, ya en la “maduritud” (nada de ancianos): bueno, a esa parte aún no he llegado; pero, no hay nada más mañoso y desconfiado que una persona de “edad”. ¿Por qué? No es nada sencillo ver que las cosas que viviste son historia; que las cosas que hacías, ya no se hacen; que los lugares que visitaste, no están; y que, aquellos/as que compartieron tu vida: ya no están.

A veces, siento la rabia de muchos hombres y mujeres en sus comentarios… nadie está obligado a amarlo/a; a quererlo/a; y, ni siquiera, a dirigirle la palabra. Las personas no son nuestra “propiedad” (por tiempo o dinero invertido). De ahí que la edad sea un factor primordial: con los años, aprendemos eso. Y no se tata de nada cultural o social (machismo, o feminismo). Sencillamente, en este mundo buscas relaciones que te llenen como persona; relaciones que generen un reto o desafío. Y, muchas veces, cuando conoces a alguien, en poco tiempo sabes que: no es para ti. Podrá ser la persona más maravillosa del mundo, la más pura y santa del Universo… pero, como siempre he dicho: el amor no es complicado, complicadas somos las personas. A veces, es mejor esperar otro tren, y desearle lo mejor, para todo su camino.

Sobre la cultura, no me refiero al concepto de conocimiento, o saber; sino, a la cultura vista como los valores que tenemos y en qué creemos). Hay parejas (o ex amigos/as), que si se ven en la calle: hasta cruzan, por no dirigirle la palabra a la otra persona. Eso, es de salvajes (a mí me encanta bromear sobre ello), pero es una salvajada infantil de niños de primaria. Si usted tuvo la dicha o desdicha de compartir con una persona un tiempo cualquiera ¿Por qué ignorarla? Madure y afronte sus circunstancias. Hay ex esposos que hasta orden de restricción se ponen o a algunos de sus hijos, mientras que otros: se turnan por llevar a los niños a la escuela. Misma sociedad, misma educación; pero, diferentes valores. Sí, se que debe ser un desastre ver desboronarse una relación de años y años (hijos, familia, amigos, sociedad) y que debe doler como el demonio. Pero, ¿Acaso esa persona y usted no tienen el derecho de vivir una vida PLENA?

Hay gente que ni por la iglesia se casa, por aquello de que “Hasta que la muerte los separe” parece un calvario. "Calvario" es ver esos actos de separación de bienes colgando en los tribunales (y mal hechos). ¿Dónde quedó la confianza? ¿Dónde quedó el compromiso? ¿Acaso sabe usted lo que es el AMOR? Bueno, nada tiene que ver con películas románticas, libros de auto ayuda o pasión. El amor es lo que queda, cuando no hay nada más. Si usted comprende esa frase, sabrá que si alguien no quiere estar a su lado: tiene toda la libertad de seguir su propio camino. Haga lo mismo, mujeres de todo tipo es lo que más hay en el mundo. Salga, enamórese, meta la pata cuantas veces pueda… y en esencia, ame a su mujer: como si no hubiera otra más en el mundo. No es una fórmula, es solo un detalle; el cual, en el momento exacto, marcará toda la diferencia.

Y nada, dejar ir, no significa crecer, madurar o liberarse. Solo significa que, usted, tiene de vuelta las riendas de su vida. Que ha decidido seguir adelante, y montarse en otro tren… al fin y al cabo, de trenes (lugares, personas): está hecha la vida; y todos/as debemos luchar por nuestra plenitud existencial. No se trata de cuantos lugares visitemos o de cuánta riqueza acumulemos; sino, de cuántas personas conocimos y con cuántas personas compartimos este tiempo al cual llamamos VIDA.    

17 feb 2016

El hombre y sus ruedas.


Siempre he sostenido que: un hombre se define por la relación con su vehículo. Y, no me refiero al modelo, al año o la marca del fabricante; sino, a cómo trata a su vehículo. Según mi teoría, la relación entre un hombre y su vehículo está directamente relacionada con los conceptos: matrimonio, compromiso, dedicación y trastornos obsesivos-compulsivos (risa). Y por qué, porque la relación se sustenta en la confianza y el cuidado.

Si usted tiene una bicicleta, triciclo, skateboard o patineta: no le aplica la teoría, ya que todavía no conoce del concepto “mujer” dentro de la lógica del universo (sociedad, familia). Pero, no se desanime: es pura teoría; y es, para uno divertirse un rato… yo, aún uso la patineta de mi sobrinita (Dora la Exploradora) una vez al año, cuando limpio el cuarto de los regueros (sacando el arbolito), aunque la tabla es del tamaño de mi pie… y nunca me he caído; salvo, el estrallón del Ripstik en el patio hace unos años (esos no me los han traído; quizás, para que no me mate antes de cumplir 38).

Por otro lado, si usted tiene una pasola o una motocicleta en República Dominicana: usted no es considerado gente por la mayoría de conductores . Y no importa que sea una Road King (Harley) o un Supergato (usted anda en el medio, exponiendo su vida... y mojándose). Ya, en serio, digamos que, son vehículos de recreación o de trabajo; sin embargo, son un capricho o una necesidad cuya posesión está limitada a las circunstancias (y la edad... alguien dijo crisis de la mediana edad?). Aunque he visto familias enteras (7: padre, madre y 5 hijos) en un motor de "2" pasajeros (ver imagen superior). Pero, mi teoría va orientada a automóviles, ya que representan un mayor apego a los conductores.

No existe el concepto amor por los autos; los hombres sentimos PASION por los vehículos... de ahí que algunas mujeres los destruyan solo para hacernos sufrir. Bien, si usted es de esos hombres que no le ha hablado a su carro en medio de un charco, con el agua casi a mitad de puerta: usted no tiene sentimientos; es un animal... insensible. Bueno, aunque los BMW's se apagan por menos: y nadie les habla. También, en ese momento en el que el delivery del pica pollo (quien hace las entregas mas rápido que Flash) le topa al bumper, cruzando por el frente, y lo mira a los ojos (tipo slow motion) ... usted ya sabe que le rayó la pintura; y entonces, solo desea llegar a su casa a ver el “desastre”, para saber cómo va a repararlo: así se va formando una verdadera relación con su carro. Bueno, debo aclarar que si el vehículo en el que usted anda no tiene radio, entonces es solo un automóvil (sin “alma”); salvo, que usted cante como loco dentro de el.

 Ahora bien, como toda relación, cuando usted ve que a la puerta se le desprende un pedazo, o hay partes que se le están cayendo o un sonido "raro": usted sabe que no todo esta bien.  Pero, no por ello corre al dealer a cambiar el carro: nooo!!!... lo remienda lo mejor que pueda, con lo que tenga a mano, y… sigue adelante. Aunque, algunos empeñan hasta el alma por comprar autos de lujo, deportivos, último modelo; sin embargo, el secreto no está en la marca, sino en el uso y el cuidado (compromiso). Su carro puede ser de los 90’s y estar en perfectas condiciones; o, ser del 2015 y estarse cayendo a pedazos; todo, se debe a la dedicación. 

Existe una marcada diferencia entre llevar un vehículo al taller a hacerle un servicio (bueno si está en garantía, es un palo) a hacerle un servicio uno mismo. Y no tiene que ser ingeniero de la NASA para hacerlo. La diferencia, al margen de que se cuida mejor de los componentes del motor (y que no le rompen nada) es que usted sabe las piezas que le pone a su vehículo, a veces, superiores en calidad a las de fábrica. Y eso influye mucho si piensa durar una década o más con su vehículo. Si, leyó bien, y ese es otro aspecto: algunos duramos largos años con un mismo vehículo (fidelidad??); otros, los cambian de 1-3 años, casi siempre, dependiendo de la garantía, ofertas, préstamos bancarios, etc. Sobre este punto, resulta interesante este dato: muchos de los que conozco que entran en esta última categoría: suben la foto de su nuevo carro en Instagram: SIEMPRE (hasta ahí, bien); pero, al cambiarlo: la borran. Es lo mismo que hacen cuando cambian de pareja, o están en “búsqueda”(eliminan esa parte del pasado (Por qué?).

Me gusta diferenciar la dedicación del cuidado. Por un lado, hay personas (mujeres y hombres) que se montan en un vehículo y no tienen la más mínima idea de cómo se realiza el mantenimiento del mismo, ni su chequeo (dedicación). Sin embargo, son casi “religiosos” al momento de darle su servicio al vehículo (cuidado). Lo que me lleva a los histéricos, personas que pulen la pintura semanalmente; que limpian el interior del vehículo hasta con cepillo de dientes, y que manejan a 10km/h para cuidar la suspensión, tapando el vehículo con lona dentro del parqueo (techado). A esos, casi siempre se les estrella un motorista por detrás, el cual termina sobre el baúl o techo del vehïculo, con los brazos abiertos, y diciendo: “Papá, por que frenó así”.     

Parecería tonto comparar autos y personas; sin embargo, si algo hemos aprendido de miles de años de conducta humana es que nuestra personalidad se manifiesta en las cosas que hacemos; de ahí que, si usted anda a pie, en transporte público, en 2 o 4 (o más) ruedas: su única obligación es asegurar su vida y las de sus pasajeros al momento de transitar. Mantenga sus neumáticos a presión adecuada, no compre gomas usadas; respete las leyes de tránsito; ceda el paso; use casco y cinturón; no deje objetos sueltos dentro del vehículo que puedan salir disparados en una colisión; ponga el cinturón a sus hijos; no hable por el celular o se maquille mientras conduce (mujeres); y, siempre recuerde sonreír: una sonrisa le sacará de casi cualquier apuro; bueno, salvo que choque un vehículo de un guardia.

P.d. Y nada, las brochas de pintura son mejores que los cepillos de dientes para limpiar lugares difíciles como los ductos del aire acondicionado o los botones del radio (risa).

15 feb 2016

Cuestiones de amor: ¿Desilusión?

A veces, en la vida, el mayor logro de un hombre es: conquistar el corazón de una sola mujer. Sin embargo, en el mundo en el que vivimos parece más un documental de NatGeo (depredadores y presas), que un lugar en donde podamos conocernos y encontrar a esa mujer con la cual compartiremos nuestra existencia. Ser hombre es muy difícil en este mundo de hoy: usted tiene que dominar cada ciencia, arte, profesión u oficio; y, además, ser “encantador”… eso, solo para que una mujer le haga caso. Bueno, es broma: si tiene algo de encanto, hasta lo mantiene. Sin embargo, ese no es el tema… 

Sucede en la vida que hay personas que dejan de creer en el amor; dígase, un caldo de cultivo entre desilusión, monotonía e intolerancia. Pero, ¿Qué es la desilusión? El incumplimiento de las metas autoimpuestas? ¿La falta de tolerancia hacia el otro? O, ¿la repetición de sus propios errores? 

Estar enamorados no tiene nada que ver con el amor. Es, algo así como la diferencia entre estudiar una carrera y ser un/una profesional. Cualquiera puede estudiar, pero no todos terminan… y, la diferencia está en los elementos más simples como el empeño, la perseverancia, la voluntad y los sacrificios (nota: siempre habrá sacrificios en las cosas de la vida por las cuales vale la pena vivir). De ahí que nos enamoramos de una cara bonita, de un cuerpo; pero, amamos las manías, los detalles de una mujer que la convierten en única.

No sé por qué, pero las personas que usan la desilusión como excusa son las mismas personas que emplean el concepto “aburrimiento”. Y no se lo digo como algo malo o para que esté como una Guinea (ave africana extremadamente escurridiza) buscando las causales de por qué su relación no funcionó o no funcionaría. Si algo he aprendido en esta vida es a disfrutar de las personas con sus defectos y su tiempo; si, a veces, para conocer a alguien debes hacer las cosas a su ritmo: a veces son días; otras, años… pero, solo así puede conocerse realmente a una persona.

Y ese es uno de los errores más elementales de nuestro tiempo: lo queremos todo y rápido. No dejamos que las situaciones respiren, disfrutando el verdadero valor del momento: único e irrepetible. En la vida, hay dos momentos en los que debes ser “lento”: comiendo dulce de leche, y en el amor. El primero, se acaba muy rápido; pero, el segundo, deja cicatrices de por vida. Y esa, es la segunda lección: con los sentimientos de las personas no se juega. Como diría Arjona: Hombre no es tener muchas mujeres y vida de tormenta, sino tener UNA y mantenerla “contenta”. Bueno ese es un error que no es exclusivo de los hombres.

Sin embargo, el punto de la desilusión es que no puedes pedirle limones a un naranjo; bueno, puedes hibridarlos; pero, el punto es que no se trata de esperar mucho o poco de alguien, sino de disfrutar de lo que esa persona te ofrece. A veces, olvidamos que el mayor regalo que alguien puede darte es su tiempo. Algo que, jamás recuperará… así que, aprovecha las oportunidades; o, aprende a crearlas. Al final, solo cuenta que nunca pierdas la ilusión de que: para alguien en este mundo, tú eres SU mundo.   

13 feb 2016

Si pudiera detener el tiempo: ¿Lo haría?


No hay amor, o amistad, sin un yo, o... un nosotros. Desafortunadamente, vivimos en un mundo demasiado lleno del Yo: insaciable e inconforme. Y qué decir de la manipulación, o de la carencia más elemental: formar parte de algo más grande que nosotros mismos.

Detener el tiempo… en mecánica cuántica, todo un ciclo; en la vida es, sencillamente, estancarnos en un momento. Y no me refiero a un problema, me refiero a aferrarnos a la “perfección” de un momento pasado que nos marca, literalmente, toda la vida. Imagine al niño o niña que estudió medicina porque ayudó a un enfermo/a; el muchacho o la muchacha que defendió causas perdidas y terminó como abogado/a o juez/a; aquel niño que jugaba con arena en la playa y terminó como ingeniero/a. La vida tiende a darnos situaciones que nos marcan. Pero, ¿Nos muestra un camino?; o, el camino.

El ser, es una compleja suma entre estar, pensar y actuar. Técnicamente ese es el “yo”. Y en este punto, podría decirle que en el momento exacto en que se da cuenta de que la suma de todos sus elementos lo o la convierten en un ser único, especial e irremplazable (en ciertos sentidos) comprende que necesita algo más, algo que está fuera de su individualidad; bueno, esto debo polarizarlo con el  “nosotros”; ya que, por más “bendito o bendita” que usted sea: por ahí anda un alma “inversa” a la suya, que le hará cuestionarse sobre toda su existencia. A veces, llega solo como amor; otras, como un NOSOTROS. En fin, ¿Por qué detener el tiempo?

El error más grande de la humanidad de los últimos 50 años fue pensar que todo podía envolverse en una caja y entregarse. En cierto sentido, diría que en un punto la presentación se volvió más importante que el contenido. La apariencia de una persona se volvió más importante que sus sentimientos. ¿Por qué? Fue, quizás, el deseo de cada persona de verse realizada compitiendo consigo misma, o con otros, para lograr una realización personal o existencial. Hasta aquí, ningún problema. El problema ocurre, cuando comenzamos a competir por una pareja, o con nuestra pareja. Muchas personas buscan fórmulas mágicas para el amor y un matrimonio de 50 o más años. Sin embargo, en vez de construir momentos y compartir experiencias, se dedican a competir. No me mal interprete, competir es sano en muchos aspectos; pero, los únicos logros que cuentan en la vida son las cosas que aprendimos y con quienes las compartimos: ese, es nuestro verdadero tesoro.

¿De qué vale ser la chica más bella del mundo, si se pasa el día sola, con sus amigas, mucho trabajo... y, sin nadie que haga sobresaltar su corazón???Una monotonía de días que se vuelven años, alejándola del más noble y puro sentimiento… y es ahí, donde me pregunto: ¿Si pudiera detener el tiempo?... ¿Si pudiera moverme fuera de el?... ¿Cómo haría para que el corazón de ella diera un salto en el tiempo-espacio, robando (al menos) una pequeña sonrisa… aunque sea chiquita? ¿Acaso de eso no se trata el NOSOTROS? Bueno, creo que la respuesta debe estar encerrada en algún otro post.   

11 feb 2016

Cuestiones de amor: Simpatía.


Hombres y mujeres, somos criados de una forma algo distinta sobre nuestros conceptos de amor, pareja, matrimonio, familia. Pero, lo cierto es que, sin importar la sociedad o la época: todos y todas buscamos lo mismo; algo así, como el: “para toda la vida”.

No hay dos personas iguales; súmele incontables “amores” y “desamores”, y tendrá una enciclopedia de teorías y vivencias distorsionadas sobre lo que es el amor y cómo hacer funcionar una relación, más allá de la atracción física. (En este punto, alguien siempre se identifica con los consejos de sus vivencias… y yo, les recuerdo, como cada año, que esto busca ser teoría (objetiva), que sirva para comprender un poco más sobre nuestra relación de pareja (hombre-mujer: iguales, y diametralmente opuestos)).

Tanto hombres como mujeres nos enamoramos de una presencia física (alta, rubia, de buen cuerpo y piernas largas… o, algo así). Sin embargo, solo somos capaces de llegar a amar con el tiempo y la dedicación que somos capaces de dar a esa otra persona que puede ser muy distinta a nuestro parámetro inicial. Casarse?, hasta los perros lo hacen hoy en día; sin embargo, unirse voluntariamente (ante los ojos de Dios o de su conciencia) a una sola mujer, en este tiempo, parecería más un calvario que la manifestación libre de una voluntad dispuesta a compartir este camino.

Ello, ha llevado a muchas personas (hombres y mujeres) en una búsqueda por un espiral de “belleza” (física), dejando a un lado el hecho, de que lo que nos hace únicos es nuestra forma de pensar/actuar. Pero, esta parte la dejo a un lado, junto con las mariposas en el estómago (nervios), el “sí quiero” y el “En qué lío me he metido”. Digamos qué, llega un momento en la vida en que su mujer pasa de ser un ser mítico, a una persona de carne y huesos… que ronca, patea y babea como un bulldog. Sin embargo, un matrimonio (como institución) es la prueba tangible de que el amor es solo eso: simpatía.

Una simple palabra, con un complejo significado. Algunos dirán que el amor es apego, cariño, entrega, devoción, alegría o una firme voluntad. Sin embargo, lo cierto es, que en algún punto de tu vida conoces a esa mujer que, literalmente, borra todo lo demás (incluyendo, cualquier consejo). Y sobre ello, solo habría que decir que, muchas personas no entienden que en el amor no hay un sentido de posesión; sino, un sentido de pertenencia (a la pareja, a la familia y la sociedad); también, se pasa por alto el hecho de que, en el amor: no hay dudas; ni recelos. Y es que, no hay dudas, en el sentido de que algo puede durar un instante o 90 años. Me refiero a que, llega un punto en el que, antes de rezar por ti: le pides a Dios que le de salud y alegría a ella; y, sin importar el cansancio o los problemas: dejas todo a un lado, para compartir ese momento especial juntos.

Los hombres estamos hechos para ser DUROS; sin embargo, todos sabemos que en una casa LA MUJER manda. Bueno, no es la regla; pero, el punto es que como hombre siempre tratas de darle valor a su opinión; salvo, que ella no tenga la razón… entonces deberás disculparte y buscarle la vuelta para que ella te perdone, aunque ella se halla equivocado y tu tengas la razón. ¿Por qué? porque así es el amor: una compleja maraña de sentimientos, reducidos a un solo concepto: simpatía. El hecho de que me preocupo más por cuidarte a ti, que de mí mismo. 

7 feb 2016

Solo vivimos una vez.


Si alguna vez se ha detenido a lanzar una piedra sobre un lago o un río con la superficie en calma, podrá apreciar el hecho de que, no es solo cuántas veces rebota la piedra sobre el agua; sino, las ondas que cada “rebote” produce en la superficie. Hay un punto en que esas ondas convergen y, literalmente: se cancelan; quedando solo los remanentes difusos de un efecto lineal. Lo mismo, sucede con nuestra vida.

Cada decisión que tomamos, tiene una consecuencia. A veces, previsible; otras, imprevisible. Y ello, nos lleva por el camino de la experiencia y la construcción de nuestra vida. Debo aclarar que, aplicando el tema al Carpe Diem y al YOLO: la idea se ha desnaturalizado bastante. No se trata de vivir la vida como si fuera el último día (excesos), ni pensar que lo que hacemos hoy no tendrá repercusiones mañana (excusas). El hecho de la expresión solo refiere a que debes hacer lo que sea que hagas, de la mejor manera posible; porque, si faltas mañana, alguien debe ser capaz de retomar lo que has dejado y seguir adelante. Ello, aplica a nuestros padres, a nuestros hijos, a nuestra pareja.

La vida, es un don. Nadie sabe cuándo llegará su hora. Pero, no por ello debemos privarnos de vivir plenamente. Conozco personas como yo, que son extremadamente precavidos con las variables y los resultados. Y ni siquiera ellos/as pueden controlar los resultados de cada día. Y ahí está uno de los secretos de la vida: vivir el día a día haciendo de las cosas simples algo memorable. ¿Cuándo fue la última vez que almorzó o cenó con sus padres? ¿Cuándo invitó a su pareja a una cita solos? (los abuelos cuidando los nietos por el fin de semana) ¿Cuándo fue la última vez que llamó a un viejo amigo y le dijo una extensible muestra de malas palabras que, terminaron en alguna remembranza y en risas? ¿Cuándo fue la última vez que sacó tiempo para usted mismo/a?

Son esos detalles de la vida los que nos recuerdan que los años cambian todo y que las cosas, solo nos suceden una vez en la vida; para luego, cambiar. Y eso, es lo maravilloso de vivir; ya que, fuera de lo bueno y lo malo, de lo esperado e inesperado, nos encontramos aún aquí, reflexionando sobre esta “basura” existencial que solo nos sirve para valorar lo único que tenemos y que realmente importa: nuestra vida. Es como ver a un perro tosiendo (atragantado por un hueso): sin importar los peligros y las preocupaciones, al final, terminamos moviendo la cola (alegres); y, esperando… nuestra próxima aventura.